«Me siento feliz de ofrecer esta recopilación del tercer año de cartas escritas para las almas que me acompañan en el sendero espiritual pero, en realidad, para todas las almas; ya que como dice Paramhansa Yogananda, todos estamos siguiendo un sendero espiritual. Así pues, se las ofrezco también a aquellas personas que en este momento puedan sentir su mensaje lejano, ajeno a sus necesidades o inquietudes presentes. Quizá para ellas llegue el día en que estas cartas revelen una señal o una dirección hacia la meta que buscan, tal vez sin saberlo. Por mi parte, a medida que camino por la ribera del río Torío, y de la vida, las cartas van desplegándose en respuesta al anhelo de manifestar en lo posible las cualidades del alma. Su punto de partida es siempre la búsqueda de esas cualidades. Y me experiencia es que en esa búsqueda surge la guía hacia ella y su desarrollo paulatino. Espero que, al igual que a mí, vayan haciendo aflorar en quien las lea, aunque solo sea un fragmento de lo que constituye el Ser: la paz, la calma, la alegría y, finalmente, la dicha que es la esencia del alma».